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Miércoles 30 Enero 2008

El efecto dominó de los seis nuevos hospitales


Hospital del Henares, Infanta Sofía, Infanta Cristina, Hospital del Tajo, Sureste e Infanta Leonor; seis nombres a los que habrá que acostumbrarse, seis centros que se inaugurarán el mes que viene; seis hospitales que atenderán al 15 por ciento de los madrileños y que modificarán en todos los aspectos la asistencia en la región, según ha relatado Juan José Güemes en un encuentro monográfico con diario médico.

Rosalía Sierra
28/01/2008

Febrero es el mes elegido para arrancar "la reconversión de la sanidad pública madrileña". Y es que inaugurar seis hospitales de golpe tendrá repercusión en todo el sistema asistencial de la región, según describe su consejero de Sanidad, Juan José Güemes. Este cambio impactará directamente en los tres pilares del sistema: profesionales, usuarios y gestores. Sin ir más lejos, "se producirá un trasvase del 15 por ciento de la población, que cambiará de hospital de referencia. Eso es algo que no ha ocurrido nunca, ni en España ni en Europa".


En algunos centros el impacto será mayor. Por ejemplo, el Gregorio Marañón, La Paz y el Hospital de Getafe perderán entre el 30 y el 40 por ciento de la población que atienden en la actualidad. Sin embargo, el traspaso de recursos "será de hasta un 10 por ciento".


¿Cómo es posible conservar personal y dotación si no hay a quién atender? Para Güemes, es muy sencillo: lo que se pretende descargando a los centros de origen es, "tal y como ya les hemos pedido, que potencien sus servicios de excelencia". Es decir, "el Hospital Infanta Sofía no hará trasplantes; para eso está La Paz".


Sin embargo, este planteamiento es aún teórico, dado que "la población afectada podrá elegir entre el nuevo y el antiguo", un primer paso hacia la libre elección absoluta. Por ello, por un lado "sabemos que los nuevos hospitales drenarán recursos de los existentes, pero aún no sabemos en qué medida y con qué plazos se drenará la actividad". Y por otro lado, ¿qué pasa si los usuarios deciden masivamente quedarse con su hospital de toda la vida? El consejero lo tiene claro: "Los nuevos deberán promocionarse para atraer a los usuarios, y si no lo consiguen, habrá que cesar a los equipos directivos".


No obstante, la elección será, por el momento, prácticamente aleatoria, porque los datos sobre actividad y resultados no estarán disponibles: "Nada me gustaría más que un escenario en que todo el mundo tuviera acceso a la información hospitalaria, pero no puedo tener un plan concreto; es algo que aún no está cerca".


Lo que sí está previsto hacer en esta legislatura es salvar el hueco tecnológico que separará a los centros más antiguos de los nuevos, que nacen completamente digitalizados y sin papeles.


Aunque no hay cronograma, Güemes adelanta que el proceso seguirá "un orden lógico: primero, la primaria correspondiente a las áreas de influencia de los centros; después, los hospitales de origen y sus centros de salud correspondientes, y, por último, el resto del sistema".


Güemes: "La zonificación limita la elección del paciente; es pura burocracia"
"La zonificación es un trámite burocrático que responde al afán regulador de las administraciones y limita la capacidad de elección del centro en el que los pacientes quieren ser atendidos. Es una cuestión que no interesa a los enfermos, y por eso no es nuestra prioridad. Preferimos dar la posibilidad de elegir el centro en el que se quiere ser atendido y estimular laboralmente a los profesionales que poner en marcha esta regulación".


Así de categórico se ha mostrado el consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, Juan José Güemes, cuando se le preguntó por el decreto de zonificación sanitaria, que está pendiente desde 2006. Güemes comentó en este sentido que "no es necesario aprobar una norma que regule las zonas sanitarias para garantizar el buen funcionamiento del sistema" y se mostró tajante al afirmar que "cuanto más lo pide la oposición, más ganas me dan de no sacar adelante esta norma, para demostrarles que la regulación no mejorará los resultados".


Por otro lado, y a pesar de que no se han fallado los concursos de reordenación de servicios de los hospitales de referencia 12 de Octubre, La Paz, Ramón y Cajal, Gregorio Marañón y Móstoles que se han publicado en el último mes en el Bocam, el máximo responsable de la sanidad madrileña declaró que las consultas, los quirófanos y las camas que queden libres cuando se pongan en marcha los nuevos centros "se utilizarán para ofrecer la actividad en la que estos hospitales son referentes en la capital, la provincia y todo el país, donde su desempeño es excelente. El hecho de que se reduzca el número de pacientes que atienden no significa que se queden servicios sin utilizar, sino que se emplearán donde sean más efectivos".


Madrid sólo captará a médicos de otras regiones para especialidades deficitarias
La Consejería de Sanidad ultima su revolución en materia de recursos humanos para abrir sus nuevos hospitales, un cambio profundo que supondrá la reorganización total del sistema. Para afrontar este reto, Juan José Güemes subraya que "en el arranque de estos centros se contará con personal que ya trabaja en la sanidad pública regional. Las comunidades vecinas de Madrid sólo podrán asustarse con nuestro interés por atraer a médicos de las especialidades deficitarias, donde trataremos de captar a lazo a los mejores en Radiología, Pediatría, Ginecología, Anestesiología y Urgencias".


Según Güemes, a pesar de la apertura de estos seis nuevos hospitales, "Madrid es la autonomía con menos problemas de recursos humanos, un déficit real que no reconocen los consejeros socialistas".


Aun así, él cree que el panorama se puede complicar más en diez años, y por eso apuesta por incrementar el número de plazas de pregrado: "La Administración no tiene la obligación ni el derecho de decir a un estudiante que no puede cursar Medicina porque un sesudo funcionario ha decidido que sólo necesitará 150 pediatras dentro de una década. Discuto el mecanismo de numerus clausus".


Güemes considera que hay que planificar, pero que "es imposible pedirle a un Gobierno que adivine el futuro". En este sentido, el consejero madrileño afirma que "en las facultades de Medicina de la comunidad hay hueco para más alumnos, y en la región hay espacio para nuevas facultades". Así, contra el parecer de la Conferencia de Decanos, anuncia que en esta legislatura se pondrán en marcha tres nuevas facultades "tanto privadas como públicas" en la región.


Pero Güemes es consciente de que el sistema necesita especialistas y que eso no se cura sólo con más plazas universitarias. Por eso, además de seguir ofertando el cien por cien de las plazas MIR, "una de nuestras prioridades será la acreditación como unidades docentes de todos los servicios de la comunidad que tengan posibilidades de formar. Es más, en dos años habrá unidades docentes en los nuevos hospitales". En esta línea, apuesta por conseguir que los hospitales privados también se impliquen en la docencia, como ya lo ha hecho Montepríncipe.


Contra los problemas de personal, Güemes deja claro que dará "todas las facilidades para compatibilizar trabajo en el sector público y en el privado. Hablar de incompatibilidades es un discurso de antes de la caída del muro de Berlín".


Fuente: Coordinadora de Latina